Y la calle era nuestra


A través de este póster presentado por Jesús Ibáñez en el I Congreso de Historia y Patrimonio de Viver, recordamos cuando la calle era el patio de juegos.

Los juegos tradicionales fueron mucho más que un simple entretenimiento: eran el lenguaje de nuestra infancia, el espacio donde aprendimos a compartir, a competir con sana rivalidad y a crear recuerdos imborrables. Con un caballo de cartón o una cocinita, las niñas y los niños de antes expresaban emociones, desarrollaban habilidades y forjaban amistades. Los adultos, mientras, se reunían en el frontón o alrededor de una partida de cartas.

¿Dónde quedaron aquellos juegos que llenaban las plazas de risas?

  • "Chispa, centella y rayo"

  • "Soldaditos de plomo"

  • "La culebra"

  • "Estatuas de sal"

  • "A la una la mula"

  • "La comba"

¿Los dejaremos caer en el olvido?

En Viver, creemos que estos juegos son parte de nuestro patrimonio cultural y queremos mantenerlos vivos.

🔍 ¿Te animas a revivir estas tradiciones? Escanea el código QR que encontrarás en el cartel y redescúbrelos.

¡La calle puede volver a ser nuestra!